La acción formativa para los empleados dentro de las propias empresas supone una excelente inversión para las mismas, ya que mantiene a la plantilla actualizada respecto de las últimas novedades del entorno laboral y, además, constituye una oportunidad para fomentar las relaciones laborales y el trabajo en equipo.
La formación para empresas conlleva un beneficio mutuo, tanto para los trabajadores, como para el empresario, ya que aumenta las competencias y cualificaciones del trabajador, lo que repercute en la mejora del funcionamiento de la empresa.
Sin embargo, no todas las formaciones consiguen estos objetivos de cualificación laboral. Por ello, es importante tener en cuenta una serie de aspectos a la hora de organizar una formación para empresas.
Índice de contenidos
Elegir la temática del curso
Es quizás el paso previo más importante a la formación. Es necesario atender a las necesidades, tanto de la empresa como de los trabajadores, de forma que la propuesta resulte interesante y, al mismo tiempo, útil y enriquecedora. La formación ha de ser dinámica y debe incluir prácticas donde se muestre la aplicabilidad de los contenidos teóricos.
Elaborar un Plan de Formación
Antes de comenzar la formación, es aconsejable elaborar un Plan de Formación, donde incluiremos aspectos clave para el éxito de la formación, como:
- Los objetivos formativos que queremos alcanzar con nuestra formación.
- Elaborar el programa con los contenidos a impartir.
- Realizar un cronograma con el tiempo que nos llevará la formación, los horarios y las fechas que mejor se adapten a las circunstancias de los asistentes y profesores.
- Elegir la modalidad más adecuada a la formación que queremos realizar, teniendo en cuenta las características de los asistentes.
Uso de herramientas interactivas
El uso de herramientas interactivas puede ser un gran apoyo a la formación de empresas, ya que dinamiza los cursos y aumenta la participación e interés de los asistentes.
Algunas, como la herramienta Kahoot, ayudan en gran medida a dinamizar las formaciones, aportando, además, una excelente forma de evaluar el éxito de la formación a través de juegos
¿Dónde impartir mi formación?
Si se opta por una formación presencial, habrá que tener en cuenta una serie de factores a la hora de elegir dónde realizar el curso. Las salas deben ajustarse a nuestras necesidades, deben ser espaciosas, limpias, estar bien iluminadas y contar con todos los requisitos técnicos y de mobiliario necesarios para poder impartir la formación se forma adecuada.
Otro aspecto con el que hay que contar es la ubicación del aula donde se imparta la formación para la empresa. Además de estar bien comunicada y ser de fácil acceso, lo ideal es que se encuentre próxima al centro de trabajo, de forma que se facilite la asistencia de los trabajadores a la formación.
Existen muchas ideas para organizar formaciones para empresas en las que la implicación y participación de los trabajadores sea óptima. El éxito de estas formaciones, dependerá del trabajo previo realizado por el departamento de formación, buscando temáticas interesantes y a la vez productivas, creando un plan de formación adecuado a las necesidades de la empresa y del trabajador, y fomentando la participación y aprendizaje.
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