El término “startup” se está utilizando cada vez más en el mundo laboral para referirse a aquellas pequeñas empresas innovadoras que, a través del uso de la tecnología, se han creado para dar nuevos servicios y productos.
Sin embargo, en ocasiones la diferenciación entre estas nuevas empresas y las demás no está muy clara de forma que se plantean dudas sobre qué se considera startup y qué no.
Por ello, es importante establecer las características que tienen estas empresas startup para poder diferenciarlas de las empresas más tradicionales y saber cómo se pueden crear en España y mantener su actividad.
Índice de contenidos
¿A qué llamamos “startup”?
Una startup es una empresa de nueva creación que se caracteriza porque, con una baja inversión económica, utiliza las tecnologías para proveer de servicios y productos con un alto poder innovador, dando solución a una demanda a través de una fuerte base tecnológica y que tiene unas grandes expectativas de crecimiento en sus primeros años.
Estas son las principales características que debe tener una startup para poder considerarse como tal. Es por ello que no todas las PYMES de nueva creación se pueden incluir dentro de esta categoría.
Cómo crear una startup en 7 pasos
Si estás pensando en crear una startup para llevar a cabo un nuevo proyecto, es importante que tengas en cuenta una serie de pasos que pueden ayudar a minimizar riesgos y a prever posibles inconvenientes del proceso.
Valida tu idea
El primer paso y quizá uno de los más importantes, es buscar una idea de negocio innovadora que dé respuesta a una necesidad, de forma que sea posible poner en marcha una startup que provea de este servicio o producto a nuestros clientes.
Siempre es conveniente realizar un estudio de mercado relativo a nuestro futuro negocio para poder tener una visión clara de cómo está la situación respecto del producto o servicio que queremos ofrecer.
Rodéate de un buen equipo
Rodearse de las personas adecuadas es imprescindible en cualquier empresa, máxime si ésta es de nueva creación, pero en el caso de una startup, además, puede suponer la diferencia entre tener éxito o no. Es importante crear equipos de trabajo formados, unidos, emprendedores, comprometidos con el negocio y fiables. Si va a haber socios, nunca está de más establecer pactos de socios previos para delimitar correctamente las funciones y limitaciones de cada uno, así como su participación.
Crea tu propia marca
El marketing de una startup es fundamental, tanto para llegar a nuevos clientes como para posicionarse dentro del sector que hayamos elegido para nuestro negocio. Crear una marca, posicionarla en el sector y diferenciarla del resto de startups del mercado, es un punto a tener muy en cuenta a la hora de poner en marcha tu startup.
Define la estructura de la startup
Definir la forma jurídica que va a necesitar tu startup es necesario para poder ponerla en marcha. Las opciones legales suelen ser Sociedad Limitada, Sociedad Civil o Sociedad Cooperativa, aunque existen más fórmulas para arrancar este tipo de negocios. Todo el proceso legal requerirá de una asesoría especializada y profesional que puedan aconsejar en temas legales de la mejor forma posible.
Una vez definido, será necesaria la inscripción en el registro según la normativa aplicable.
Consigue financiación y controla el gasto
Por supuesto, no podemos olvidarnos del empuje económico que puede suponer poner en marcha una nueva empresa. Conseguir financiación es siempre un quebradero de cabeza para cualquier emprendedor y debe ajustarse al tipo de startup que queramos crear. Es necesario tener una previsión de los costes en los que tendremos que incurrir, así como de posibles imprevistos que puedan ir apareciendo.
La financiación puede realizarse mediante crowdfunding, financiación bancaria, por capital de riesgo o business angels, por nombrar algunos de los más comunes.
Busca información y consejo
Empezar y crear una empresa desde cero plantea muchos interrogantes y situaciones desconocidas, de forma que siempre es interesante buscar información, consejo y experiencia en especialistas en este tipo de negocios.
Controla el crecimiento y vigila el negocio
Por último, una vez puesta en marcha la startup, no hay que perder de vista los objetivos marcados a corto y largo plazo, siempre controlando el crecimiento que va teniendo la empresa, tanto si es moderado como si es un crecimiento rápido. No queremos que se descontrole y no seamos capaces de afrontarlo.
La ubicación física es otro factor que deberemos considerar. Es probable que en un inicio no tengamos capacidad ni recursos para alquilar oficinas y establecer el negocio. Para estos momentos, el alquiler de salas de reuniones puede ser una opción muy eficaz a la hora de poner en marcha la startup, tanto para llevar a cabo reuniones de equipo como para hacer presentaciones de producto y captar nuevos clientes.
Recuerda que si necesitas alquilar un espacio para reuniones o una sala de reuniones o sala de formación en Torre Ombú contamos con una amplia variedad de salas en alquiler. No esperes más y contacta con nosotros o llámanos al teléfono 917 816 430.